El tren rápido Santiago-Chillán: promesas incumplidas y baja velocidad
El tren rápido que conecta Santiago y Chillán, anunciado como el más veloz de Latinoamérica, no está cumpliendo con las expectativas en cuanto a velocidad y frecuencia de servicios.
De acuerdo a lo informado por el diario El Mercurio, aunque se proyectaba que alcanzaría los 160 km/h, actualmente opera a un promedio de 80 o 90 km/h, lo que reduce significativamente la diferencia entre el servicio expreso y el regular. Además, de las seis frecuencias previstas, solo están operativas tres.
Los retrasos en los tiempos de viaje se deben principalmente a problemas de infraestructura ferroviaria y la falta de coordinación con otros trenes que usan la misma línea, así como a los efectos de los temporales de 2023, que obligaron a realizar reparaciones en varios tramos de la ruta entre Santiago y Chillán.
Otros factores que afectan la velocidad son las estaciones que aún están en proceso de reacondicionamiento y los numerosos cruces a nivel con carreteras.
El ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, reconoció que las frecuencias y tiempos de viaje no son los deseados, pero aseguró que con la recuperación de las estaciones, como la de Curicó, se espera reducir las actuales cuatro horas de trayecto.
Asimismo, el expresidente de EFE, Pedro Pablo Errázuriz, subrayó que el proyecto tiene distintas fases y que las mejoras se implementarán progresivamente, incrementando las frecuencias y modificando las estaciones para optimizar el servicio.